7.21.2009

Mi Túnel - parte 2

Me sentí tan cerca que preferí alejarme

No te entregaré mi soledad...

No estoy dispuesto a perderlo todo, espacio más que tiempo o muerte más que vida. La ambición no es para mi, tampoco las máscaras infernales que tímidamente se ocultan tras las culpas erróneas de la salvación metafórica remendadas a una oración tardía (susurrada) para salvar un alma que (de ser el caso) no lo merecería.

No estoy dispuesto a cargar con el baúl de los compromisos vagos e hirientes, no deseo la paz eterna ni el pago de mis acciones o de las cadenas que implica.

¿Es mucho pedir ser ajeno al progreso?

Y que la vida corra hasta la meta y entonces mis huellas se borren con olas de memorias borrosas. No quiero ser recordado por todos, no quiero ser una imagen recortada o un dibujo de crayola sin piso o cielo.

Yo me veo ausente, agotado, hastiado y nauseabundo.

No me considero feliz, aunque el análisis racional implícito en esta declaración describe perfectamente el mecanismo que usualmente recorro... patético!

OK, sólo algunas veces que me vi flotando en ríos de colores, cantando canciones bastardas o blandiendo la espada de la honestidad... oh, qué bien se siente estar abrazado a mi soledad!

Ahora los vientos soplan sobre las velas rotas y me suplico abrir los ojos para despertar entre leones hambrientos.

¿Será mi sangre de su agrado?

No ignoro los días de asueto, respeto sus sueños y las ganas de llorar, mas no comparto las frutas vanas y sus alicientes para viajar. Y es que la consciencia lo consume todo, verdades... mentiras... ¿quién conoce la verdad?

Si me ves pasar no me llames ni pronuncies mi nombre... el vacío no debe ser nombrado!
JUSTICE
Powered By Blogger