Las primeras horas sin ti

Ahí estaba
llorando frente al viejo altar que yo mismo construí
horas y días
tratando de saciar mi infinita sed de ti.

Esperando explicaciones que nunca llegaron
vomitando poemas que nunca leerás
buscando un dios que aliviaría mis penas.

Él ama a sus hijos de maneras en verdad extrañas
misteriosas
indescifrables
(Suponiendo que soy uno de sus hijos
y suponiendo que me ama).

Ahí mismo me saqué los huesos
sólo pensaba en tu armadura blanca
caminando con el rostro en alto
portando esa deslumbrante sonrisa
con los ojos cansados
y los brazos pesados.

Te imaginaba sangrando
llorando como yo...
Pensando que tal vez nos volveríamos a ver.

Supuse que regresarías
que era pasajero como las otras veces.
Casi podía verte venir a mi
caminando entre tristezas ajenas
con las manos frías y la nariz roja.

Nada pasó
y ahora...
mucho tiempo después
con la pluma fría y sin rencores:
gracias por mi soledad

Sin tus ojos puedo imaginarme otra vida
sin tus sueños puedo atender los mios
sin tus compromisos soy aire
sin tus miedos, que ya eran los míos, soy fuego

...mucha suerte.

JUSTICE